Desde hace bastante tiempo, en realidad muchísimos años, se publica para los cursos de peluquería o de oficios, la leyenda “Rápida salida laboral”, y cuánto engaño hay detrás de esa frase.
Quien escribe esta nota, es un profesional de la peluquería con cerca de 30 años de profesión, pero que, obviamente, alguna vez fui un alumno. Les contaré brevemente cómo es el trayecto –en forma general- de una persona que estudia, en este caso, peluquería.
Cuando uno comienza a estudiar, es algo abstracto, sabe que existe, pero ignora cómo se lleva a cabo; es decir, sabemos que hay salones de peluquería, que allí hay un peluquero/a que realiza trabajos y que la gente sale cambiada, estilizada, bien arreglado su cabello, ¿verdad?, pero no sabemos cómo o qué hizo el peluquero para lograr eso en tal persona. Luego vamos aprendiendo y lo abstracto comienza a ser una realidad, seguimos avanzamos, terminamos, recibimos el certificado y ahora…
Y allí llega lo que llamo la decepción del nuevo profesional. En el mejor de los casos alguien tiene dinero y logra abrir rápidamente su salón, pero al poco tiempo, es muy probable que muera en el intento. Por qué? Porque no estaba debidamente preparado para la realidad de abrir un negocio y menos para un negocio tan singular como lo es “la Peluquería”.
Pero todo esto tiene un denominador común, un responsable:
“LA MALA ENSEÑANZA”
Y cuando hablo de mala enseñanza no hablo de una escuela en particular, sino de un conjunto de cosas que hacen que la enseñanza sea mala, ej: trasmitir lo que sé, NO es enseñanza; transferir mi forma de trabajar, NO es enseñanza; impartir métodos basados sobre libros, NO es enseñanza; si en 3 o 6 meses se pretende formar un peluquero, NO es enseñanza; y podría escribir páginas sobre esto. Vivimos en una sociedad donde cualquiera pretende enseñar… y donde pareciera que lo único que les interesa es facturar, y allí aparece, entre otras cosas, la nefasta frase promocional “Rápida salida laboral”, la cual es una flagrante mentira. Ser peluquero no se hace de la noche a la mañana. Por favor dejemos de mentir y seamos serios y honestos. Lo peor de todo, y triste, por cierto, que la culpa es de los propios peluqueros.
Un paréntesis, vez pasada ahora en 2022, vi una publicación a modo de publicidad emitida por la universidad nacional sobre cursos gratuitos de peluquería; bien, el problema no es la gratuidad, sino que decía online en 3 meses… a ver, los que somos profesionales sabemos fehacientemente que en modo online es imposible llegar a ser un peluquero profesional. Pero ¿por qué suceden cosas como esta?, porque los propios peluqueros lo permiten, y ni hablar de los que se dedican a la enseñanza en el rubro. Pero no hablaré más sobre este tema porque es muy amplio y tal vez en otros escritos haré referencia a temas muy importantes como:
“Universidad: carreras vs oficios, ¿por qué?”
“La Universidad la ignorancia del verdadero saber”
“Peluqueros, Ministerio de Educación o matrícula?”
Entonces, cosas como esta frase pareciera ser una burla hacia la sociedad. Porque en el fondo se están riendo de la gente que por necesidad va ciega, con la fe puesta en que ello puede ser la solución para su ostracismo social.
Elevemos nuestra profesión, no la sigamos denigrando.
Desde la directiva de OIEPA, sus academias y escuelas adheridas, seguimos trabajando para brindarle a la sociedad la calidad de enseñanza que se merecen.
«No es posible que una sociedad crezca cuando la educación es mediocre»
(Rubén Espíndola)